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martes, 19 de julio de 2011

Sus soles

Juega mucho, convierte su vida en un juego, se cae, se raspa, brilla, pero quiere brillar como ellas. 

En su intento se queda corta, sigue tratando.
Busca la forma de alcanzar todo lo que desea, vuela, brinca, nada, ella es libre.
Quiere llegar muy alto, quiere un vestido que no es de tela.
Lo ve, se enamora de inmediato, quiere que él la note, así que va en busca de su vestido, crea un cohete que se impulsa con los destellos del deseo, al fin llega a las estrellas. Cuando aterriza se da cuenta que ya no brillan, voltea hacia el sol, lo ve enorme y brillante. Le recuerda a los ojos de su amado, se va hacia él a sacar un poco de brillo para su vestido. Los sistemas de su nave se estropean, pero se da cuenta que aún así avanza hacia él, la atrae con toda su fuerza de gravedad como los ojos de su amor. Feliz de sentirse cerca de él, se da por vencida, cierra los ojos, se deja llevar.

Se quema.

Despierta.

Muere.

Su llave

No quiere parar, piensa en cómo puede tener las llaves, siempre le duele la cabeza a la mañana siguiente de tanto pensar, ella lo necesita. Ha recorrido camino por mucho tiempo, quiere vivir en un lugar sin vecinos. Sus sentimientos reales no se han ido.
Para salir de ese mundo tiene que romper la barrera de su nombre, ya no es una reina, ha renunciado a todo por él, realmente lo ama, pero él no lo sabe.
Ella busca las llaves de su corazón al rededor del mundo y no las encuentra.
Un día se topa con él de frente, le sonríe temerosa, él la corresponde.
Ella nota que la llave estaba en su interior.
Se conforma, no pide nada más, no anhela nada más, se ahoga en su amor.

Despierta.

Muere.

Tus ojos

No digas lo que no quieras decir, vives en un tiempo alterno al nuestro, en otro universo, cuando sonríes aún esos tristes ojos se ven así, tristes.
Te miro caminar por las calles, agachas la mirada.
Y aunque bromees y digas que todo parece estar bien no lo crees, pues sabes que no es verdad.
Tu mirada es triste.
Tomas tu corazón y lo quiebras en la oscuridad antes que otro lo haga.
Te pierdes en el tiempo.
Ya no sabes ni en dónde estás.
Ya no sientes.
Tus ojos enormes y decaídos.
Aún puedes vivir.
En el otro universo no despiertas.
No puedes morir.
Quieres hacerlo e ideas cómo mientras observas a tu corazón en aquel frasco en la repisa.
Te quedas dormido pensando.

Despiertas.


Mueres.

Corre




Camino por las calles de noche, siento un soplido místico que me ilumina la vista del mundo al tiempo que siento frío, miro la luna y pierdo el aliento.
Algo me persigue y comienzo a correr, pierdo mi destino y me dirijo a cualquier lugar ahora.
Sonrío ante las estrellas, veo un caballo, lo monto y huyo sobre él en la oscuridad. La noche me envuelve, -tú el que que me sigue detente, no quiero huir más lejos, eres el que me ha desviado de mi rumbo -pienso, aunque ahorita no hay elección, puede ser esto o morir.

Te he perdido misterioso errante, calmo al caballo y me doy cuenta que estoy metida entre los brazos de la oscuridad, no sé en dónde estoy, ¿Debo retomar mi camino o hacer uno nuevo? ¿Por qué me seguías? Quizá son cosas que nunca responderé, y ahora aquí atrapada en tus brazos noche inmensa y oscura, deberías guiarme a dónde ir… lejos, lejos, lejos.

Quizá ya no quiero a donde quería, ahora sólo quiero ser libre, lejos, muy lejos de aquí, no sé qué estoy buscando pero estoy segura de que no es esto. Miro mis zapatos negros y los noto llenos de tierra.
Comienza a hacer mucho frío, de pronto la niebla ya no me deja ver ni mis pies, camino sin dirección, me cubro con la capa que traigo en la espalda.
Me bajo del caballo, y comenzamos a caminar juntos.

Veo algo brillante muy a lo lejos, no estoy segura de qué pueda ser.

Estoy perdida entre árboles, puedo escuchar un riachuelo a lo lejos.
Pienso qué podría hacer ahora, nada se me ocurre y sólo sigo caminando. La belleza de este sitio, aunque sea entre tinieblas, es enorme.

Siento hambre.

No tengo dinero, no tengo en donde refugiarme, sólo un caballo robado y lo que uso.
Caminamos lento. Caigo en un agujero enorme, siento dolor, mi corazón late muy fuerte pero muy lento, puedo sentirlo a punto de salirse de mi pecho.

Despierto.

Muero.